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La
Actualidad de la Lengua Española |
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Nombre del Autor: María Zulma M. Kulikowski |
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El español, una lengua mestiza. Intervenciones completas del coloquio interatlántico organizado por Comunica - Unidad en la Diversidad. Texto reproducido con el permiso del Prof. Tito Drago, editor de la revista Comunica. |
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Minicurrículo:
Profesora
de Lengua Española de la Universidad de São Paulo y Vice-Presidenta de la APEESP. |
El cambio de perspectiva que las nuevas relaciones históricas y
socio-económicas trajeron para la enseñanza del español en Brasil transformó, ya a
partir de los años ochenta, el panorama de inserción de nuestra lengua en la realidad
brasileña. Estudiar español dejó de ser un hobby o la búsqueda de un simple
instrumento para la lectura, como señalaba la profesora Neide González, para
transformarse en una necesidad que llevaba a pensar en una futura profesión. Si bien entre los años 1942 y 1961 existió la asignatura lengua española en la
enseñanza media de las escuelas brasileñas, junto con las clásicas -latín y griego- y
las modernas -francés e inglés-, posteriores reformas llevaron a la paulatina
disminución de esa oferta plurilingüista hasta reducirla a una lengua moderna que, poco
a poco, llevó a que se entendiese como sinónimo de inglés. A nivel superior, la Universidad de São Paulo cuenta con una tradición respecto a la enseñanza de la lengua española desde su creación en 1934 -y ya en 1964 existía la graduación en español-, pero el número de graduados era muy pequeño, dadas precisamente las pocas perspectivas profesionales que el estudio de la lengua proporcionaba. |
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Pero los cambios políticos, las sucesivas y permanentes migraciones entre Brasil y los países vecinos hispanohablantes y la necesidad de crear nuevas relaciones económicas y diplomáticas, trajeron como consecuencia importantes cambios en ese panorama monolingüista. Me referiré específicamente al Estado de São Paulo. Podemos citar, en orden cronológico, la creación de la «Asssociação de Professores de Espanhol do Estado de São Paulo» (APEESP) en 1983, la creación del «Instituto Latino-Americano» en 1987, un foro de discusión de problemas comunes que puede interpretarse como un gesto de aproximación entre los países del Cono Sur y que culminó en la creación del MERCOSUR. Y en ese mismo año, la firma de un decreto que crea, a partir de 1988, los llamados «Centros de Línguas» que incorporan a las escuelas públicas del Estado de São Paulo la enseñanza optativa de otras lenguas modernas, entre ellas el español. Me referiré
brevemente a dos de estos hechos, porque creo que nos tocan de manera especial como
profesores: la creación de la APEESP y la creación de los llamados «Centros de Línguas». Los profesores de
español en Brasil La APEESP fue una de las primeras asociaciones de profesores de español de Brasil para ser más exacta la segunda, después de la de Río de Janeiro- y entre los objetivos de su creación estaban el de aproximar e integrar Brasil al mundo hispánico y el de luchar para que la lengua española conquiste un espacio capaz de romper esa «dictadura del monolingüismo», como la llamó el profesor Antonio Esteves. |
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La importancia de la APEESP radica sobre todo en ayudar a crear no sólo la
imagen y el perfil de un profesor de lengua española con sus especificidades, sino
también la de ofrecer, tanto en sus Encuentros como en sus Congresos, una verdadera
oportunidad de actualización, reciclaje y reflexión junto a los profesores, cada vez
más exigidos en sus tareas y en número
insuficiente para la enorme demanda actual. Cada Congreso nos trae una visión más clara
del impresionante crecimiento del español a nivel nacional, de la necesidad de diseñar
políticas lingüísticas adecuadas y de la carencia, también impresionante, de un
soporte teórico sobre las especificidades que la enseñanza de nuestra lengua tiene con
respecto a su aprendiz, o sea, el alumno brasileño. Desafíos éstos que sentimos todos
los que buscamos una enseñanza de calidad. Centros de lenguas en San Pablo El otro hecho que quería destacar es el de
la creación, en 1987, de los Centros de Línguas en todo el Estado de São Paulo. ¿Qué
significan hoy los Centros de Línguas? La
oportunidad para el alumno de la escuela pública de estudiar una segunda lengua
extranjera fuera de su horario escolar, pudiendo optar entre las ofrecidas por cada
escuela (español, francés, italiano, y en algunos casos alemán y japonés), además del
inglés, ésta sí incluida en el conjunto de disciplinas obligatorias que constan en el curriculum. La creación de los Centros de Línguas reveló algo que
sospechábamos: un enorme interés por el estudio del español, que llega a crear
situaciones como la de tener que hacer largas colas para obtener una plaza en esos Centros
que, a pesar de sus condiciones precarias de funcionamiento, revelan excelentes
resultados. La llegada a la Universidad de alumnos que pasaron por ellos nos depara la
agradable sorpresa de una base de conocimientos considerable, de una mayor facilidad de
aprendizaje y, sobre todo, de un deseo vehemente de perfeccionarse. |
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¿Es positiva la obligatoriedad? Pues bien, ¿cuál es la posición de la
APEESP respecto de esa posibilidad de transformar la lengua española en obligatoria?
Nuestra asociación, que luchó contra el monolingüismo y la dictadura del inglés
considera que debe ser respetado el plurilingüismo, dejando que cada comunidad escolar
-formada por representantes docentes, padres y sociedad local- elija la lengua que
considere más importante para la formación de sus alumnos. ¿Por qué esta posición,
que parece un tanto contradictoria? Citaré algunas de estas causas: 1)
la falta de profesores con formación adecuada. Cuando me refería a la importante experiencia que fue la creación de los Centros de Línguas a nivel estadual, una de las preocupaciones que trajeron fue la falta de profesores de español y la precariedad en la formación de muchos de ellos. Sin duda estos Centros crearon una demanda de profesores que no podía ser debidamente resuelta dada la falta de profesores con una formación adecuada. Esa demanda produjo un efecto poco deseable: la de producir profesores con un mínimo conocimiento de la lengua y algunos recursos pedagógicos aprendidos en el primer libro que se les ofrece, docentes que cuentan con un título llamado «habilitante», nativos de los diversos países vecinos que, aunque tienen el español como lengua materna, no poseen un manejo del español como lengua extranjera y, en muchos casos, ni siquiera un estudio sistemático de su lengua en el país de origen, para no hablar de las interferencias de aquellos que ya llevan varios años residiendo en Brasil. |
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La exposición a la lengua española en el extenso territorio brasileño es muy
diversificada. Existen regiones de intenso contacto, ciudades donde una calle separa
países y lenguas (como Rivera, en el límite de Rio Grande do Sul con Uruguay), y, por lo
tanto, los contactos lingüísticos crearon una «interlengua», regiones limítrofes como
en Mato Grosso y Paraguay, donde los llamados «brasiguayos» conviven con la mezcla no
sólo del portugués con español sino también con el guaraní. No podemos olvidar que
hay regiones donde la intensa inmigración de diferentes países europeos, sobre todo en
las regiones sur y sudeste, llevan a considerar importante enseñar las lenguas de sus
países de origen, especialmente italiano, alemán y japonés. ¿Cómo imponer el español, entonces? ¿No caeríamos en el mismo problema del
inglés que, salvo honrosas excepciones, no consigue ofrecer al alumno herramientas para
la más mínima y elemental comunicación oral o escrita después de varios años de
cursarlo como obligatorio?. ¿Cómo formar en poco tiempo un contingente de profesores
capacitados para una población de millones de alumnos en edad escolar y en un territorio
con una diversidad cultural y socio-económica tan grande? La APEESP continúa apostando por el plurilingüismo porque considera que la
demanda por la lengua española crece y crecerá sin la imposición de leyes, y sí como
consecuencia de las nuevas realidades históricas por la que atraviesan Brasil, América y
el mundo. Nuestro papel, como profesores, será el de profundizar los estudios y la
preparación de un cuerpo docente cada vez más capacitado, ya sea desde esta Universidad,
desde la APEESP, desde las Asesorías Linguísticas de la Embajada de España, como
también desde el importante espacio que representa el Instituto Cervantes de São Paulo,
y, en breve, desde la Associação Brasileira de
Hispanistas. Sólo la formación de una masa crítica y una verdadera reflexión
teórica podrá crear las condiciones para una real y respetuosa aproximación entre
Brasil y los países hispanohablantes y sus respectivas lenguas.
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